
A primera hora, Woody Allen llegó hoy a la iglesia de Santa María del Naranco para grabar varias escenas en su interior con Javier Bardem y la inglesa Rebecca Hall como protagonistas.
Horas después y bajo la atenta mirada de decenas de personas, Allen trasladó el rodaje al merendero del Naranco, bajo la protección de varias patrullas de la Guardia Civil, que cercaron la zona.
Penélope Cruz, con un vestido blanco y un gorro oscuro, y la norteamericana Scarlett Johansson se reunieron con el resto del equipo poco después del mediodía.
A lo largo de la tarde, varios efectivos de seguridad junto a cuatro guardias civiles alejaron de la zona a los periodistas y fotógrafos que intentaban seguir el rodaje.
En un ambiente de tensión, todos los medios allí presentes optaron por ceder a la petición de la seguridad privada del film y dejar de grabar y tomar instantáneas
No hay comentarios:
Publicar un comentario